A la semana siguiente de la marcha por la Font Roja, volvimos a quedar con el grupo de los Senditos y unos amigos para hacer la ruta llamada La cortada en el termino de Cortes de Pallas.
Esta vez el recorrido lo propuse yo, ya que he estado alli otras 3 veces antes, la ultima vez el año pasado en pascuas. No es un recorrido excesivamente largo ni complicado, y al mismo tiempo se disfruta de unas vistas espectaculares.
Al igual que las anteriores ocasiones que estube alli, hicimos el SLV-13 donde detallan todo el recorrido y lo que se puede encontrar alli en muchas paginas como la de conselleria de medio ambiente SL-v 13 La cortada o en la web de RocaCoscolla.
Al igual que en las demás ocasiones comenzamos a subir desde el pueblo, Cortes de Pallas, desde donde esta el panel informativo del sendero. Como se puede ver en los perfiles del recorrido, al principio la subida es muy dura, sobre todo por que nos pilla en frío y el cuerpo aun no esta para mucha caña. Se va subiendo en zigzag por el antiguo camino de herradura hasta que una vez ganada algo de altura se suaviza algo.
Poco después se llega a la parte alta de la muela, que es totalmente llana. Allí encontramos enseguida otro panel informativo del sendero y vemos la pared del embalse. Seguimos por la pista que rodea el embalse hasta que encontramos un agujero en la valla metálica por donde nos colamos todos. Subimos la pared del embalse y podemos ver ese pequeño mar allí arriba, yo pese a haberlo visto ya varias veces sigue impresionándome. Desde allí arriba también vemos las sierras de los alrededores, la sierra Martés, la sierra del Ave, el macizo del Caroig, el cañón del Jucar, etc…
Al bajar del muro seguimos por la pista y paramos a comer en una pequeña pinada de bosque reforestado hace años tras las obras de la presa. Después el camino bien señalizado deja la pista y nos desviamos a la derecha por una senda en un terreno bastante pedregoso y lleno de hitos que señalizan el camino hasta llegar al espectacular cañón que forma la muela de cortes.
Es una bajada bastante pronunciada en algún tramo, pero sin ninguna dificultad. Seguimos hasta que llegamos al barranco por el que discurre la senda, tristemente esta completamente seco donde hace tiempo corría el agua todo el año. Lo cruzamos en algún tramo que otro tramo hasta llegar a una cueva donde al parecer hay gente que se divierte allí pasando el día y dejándolo todo lleno de latas, botellas cartones, etc… Llevábamos bolsas así que entre todos recogimos un poco todo aquello, lo dejamos limpio y seguimos bajando hacia el pueblo, veremos a ver lo que dura.
Ya prácticamente en llano llegamos al pueblo, hasta el punto de inicio donde teníamos los coches. Unas risas en el bar y devuelta para casa.
De nuevo me volvió a gustar este recorrido, seguro que lo repetiré ya que siempre acabo volviendo. Y de nuevo lo mejor la compañía, variada, caras nuevas y con ganas de rutas.