Otro de esos lugares que tenemos cerquita de casa, uno de las primeras cumbres que hice siendo bastante joven, cuando empecé a aficionarme a esto de la montaña, por lo que para mi siempre tendrá un significado especial este lugar.
En esta ocasión en lugar de subir desde el mismo pueblo de Dos Aguas por senda y por una zona bastante escarpada, subimos por la pista forestal que comienza junto a una granja abandonada al lado de la Masía El Collado convertida actualmente en granja-escuela.
La subida no entraña ninguna dificultad al ser todo pista, pero si que es bastante larga. La cumbre, donde hay una casa de vigilancia para los guardas forestales se ve muy lejana desde abajo. Fuimos subiendo poco a poco apretando el paso y bastante cargados con la idea de entrenar un poco para recuperar forma e ir tanteando mi rodilla.
Al llegar arriba hacia un viento fuertísimo, la casa de los forestales estaba cerrada sin nadie, imagino que no era época para estar allí nadie o no había riesgo de incendio. Así que disfrutamos un momento de las vistas, eche alguna foto panorámica y bajamos a resguardarnos un poco para almorzar y volvernos ya de bajada.
Un recorrido corto, perfecto para ir y venir en una mañana sin mayores pretensiones que las de moverse un poco, aunque al menos en mi caso me traiga recuerdos y me sirva para reflexionar.
Mas información: Subida desde Dos Aguas